Aprendiendo a cuidarme

Hidrolato de Azahar (Neroli)

El hidrolato de azahar (también llamado hidrolato de neroli) se obtiene por destilación al vapor de las flores de Citrus aurantium var. amara (naranjo amargo). De aroma floral-cítrico muy suave, es un tónico calmante, equilibrante y luminoso, especialmente indicado para pieles sensibles, secas, maduras o apagadas. No es fotosensibilizante.

Hidrolato de Azahar (Neroli)

Calmante y anti-rojeces

Reduce la sensación de tirantez y las rojeces propias de pieles sensibles o reactivas, aportando confort inmediato.

Equilibrante e hidratante ligera

Aporta una hidratación humectante suave y ayuda a mantener el equilibrio entre zonas secas y mixtas, dejando un acabado flexible y cómodo.

Iluminadora y tonificante

Devuelve luminosidad a pieles apagadas y mejora el aspecto del tono; favorece un aspecto más uniforme y fresco.

Regeneradora suave

Útil en rutinas antiedad y en pieles fatigadas: favorece la renovación y aporta un toque de suavidad y firmeza al rostro.

Bienestar sensorial

Su aroma floral sereno ayuda a relajar y a crear un ritual de cuidado agradable (ideal en brumas de noche o pre-sueño).

Usos cosméticos

Seguridad y conservación

No fotosensibilizante. Preferir hidrolatos sin alcohol añadido para piel sensible. Conservar bien cerrado, protegido de la luz y el calor; recomendable refrigeración tras abrir. Usar con utensilios limpios. En piel muy reactiva, realizar prueba de tolerancia previa. Consumo recomendado: 3–6 meses tras la apertura.

Conclusión

El hidrolato de azahar es un tónico exquisito y versátil: calma, hidrata ligeramente, ilumina y aporta confort sensorial. Perfecto para rutinas de día y noche en pieles sensibles, secas o maduras que buscan suavidad y luminosidad sin irritación.